Probablemente ya se habrá enterado de que la Ley de los Tres Pies por la Seguridad entró en vigor el martes. La ley, que fue finalmente firmado por el gobernador Brown el año pasadofue el resultado de un importante trabajo de grupos como la California Bicycle Coalition y, en un momento dado, de nuestro propio Bill Dullea, que testificó a favor de la legislación en 2012.
Las versiones anteriores de la legislación habían sido rechazadas por el gobernador Brown debido a la preocupación "de que el proyecto de ley permitiera a los coches desplazarse hacia la izquierda -por encima de la doble línea amarilla, si fuera necesario- para mantener la distancia mínima de un metro con los ciclistas". Aunque la nueva ley estipula que los conductores deben mantenerse a un metro de distancia al adelantar a un ciclista, contiene un texto que dice que si no es posible mantener un colchón de un metro, los conductores deben reducir la velocidad "y sólo pueden adelantar cuando hacerlo no ponga en peligro la seguridad del operador de la bicicleta."
Los conductores que no dejen un metro de espacio a los ciclistas se enfrentarán a una multa de 35 dólares. Y, en los casos en que un ciclista resulte herido, las multas aumentarán a 220 dólares. Como hemos escrito antes, las multas parecen bastante triviales si se tiene en cuenta la vulnerabilidad relativa de un ciclista en comparación con un coche. En California, 153 ciclistas murieron en colisiones con vehículos de motor en 2012. Esas 153 muertes suponen el cinco por ciento del total de víctimas mortales de tráfico del estado. Una multa de 35 dólares parece más una molestia que un castigo real, pero esperemos que la nueva ley gane tracción para recordar a los conductores que muestren un poco más de cortesía hacia los ciclistas, independientemente de los incentivos monetarios.
Como dijo Dave Snyder, de CalBike, en un artículo del Seattle Times: "En realidad no cambia lo que ya se supone que deben hacer los conductores, pero creemos que al especificar la distancia de un metro, los conductores serán un poco más pacientes y estarán más seguros al adelantar".
Aunque parece improbable que la nueva ley ponga freno a la animosidad demasiado frecuente entre automovilistas y ciclistas, actúa como un paso en la dirección correcta, recordando a los automovilistas que tienen la responsabilidad de compartir la carretera y ser respetuosos con los demás usuarios. Del mismo modo, se recuerda a los ciclistas que deben circular siguiendo el flujo del tráfico, no en sentido contrario, y detenerse siempre ante los semáforos en rojo y las señales de stop. Además, los ciclistas deben llevar ropa reflectante cuando circulen de noche para ser visibles a los conductores que les adelanten.
Será interesante ver lo agresivos que son los agentes a la hora de hacer cumplir la nueva ley. De acuerdo con la Patrulla de Caminos de California, los oficiales tendrán discreción para determinar si un amortiguador de tres pies era posible con seguridad y si el conductor estaba poniendo a un ciclista en un riesgo innecesario. En cualquier caso, es bueno que la ley que hemos estado defendiendo desde 2011 esté finalmente en vigor.