Con el reciente veto del Gobernador Brown a la ley de los tres pies, ha aparecido un nuevo producto específico para los ciclistas que quieren preservar un poco de espacio personal. La luz de seguridad para bicicletas de XFIRE permite a los ciclistas crear su propio carril bici (mientras circulan) proyectando rayos láser rojos en el suelo a ambos lados.
El mes pasado, The Guardian probó la luz de seguridad para bicicletas XFIRE en el siguiente vídeo:
En su artículo sobre el nuevo producto, el blog sobre bicicletas de TheGuardian se preguntaba si el carril bici DIY aumenta realmente la seguridad de los ciclistas o simplemente ofrece una falsa sensación de seguridad. Al fin y al cabo, si el carril bici proyectado no es claramente visible para los vehículos que pasan, el dispositivo pierde todo su sentido.
Aunque la idea de un carril bici hecho por uno mismo es admirable, la realidad parece ser que hay un desfase importante entre el concepto y la ejecución. Según el responsable técnico de la National Cycling Charity, la única persona a la que el carril bici resulta claramente visible es al propio ciclista. Se le cita diciendo:
"La carretera reflejará sólo una pequeña fracción de la luz que incida sobre ella. Y se reflejará en todas las direcciones, pero más hacia la fuente que en otras direcciones, por lo que solo una pequeña fracción se dirige hacia el conductor.
Luego está la cuestión de si el conductor está mirando la superficie de la carretera de todos modos. Las investigaciones sobre la fijación de la mirada de los conductores confirman lo obvio, que prestan la mayor parte de su atención a las posibles amenazas y señales, como el tráfico que se aproxima, el tráfico que cruza, los semáforos y las señales de tráfico, la mayoría de las cuales están fuera de la carretera o muy por encima de ella, y sólo algunas están a la izquierda o abajo en su superficie. Por lo tanto, sus ojos están principalmente hacia arriba y hacia la derecha. El reto del ciclista consiste en captar la atención del conductor en las pocas miradas que éste dirige hacia el lado cercano.
¿Puede el conductor ver siquiera la superficie de la carretera cercana? No muy cerca. Mi capó bloquea la visión de esa parte de la carretera a cierta distancia.
Creo que se trata de un truco inofensivo. Preferiría que la luz extra se dirigiera a algún sitio más obviamente útil".
A pesar de las críticas sobre su eficacia, los defensores de esta tecnología afirman que puede salvar vidas. Y, teniendo en cuenta lo que sabemos sobre el efecto dramático que puede tener en la seguridad de un ciclista incluso una separación mínima entre coches y ciclistas, no es descabellado pensar que la luz de seguridad para bicicletas pueda tener un efecto positivo. Incluso si las críticas sobre la dificultad para verlo son totalmente válidas, el único daño real para el ciclista sería tratar el carril bici creado ficticiamente como si fuera una barrera real que le protege del tráfico.
Independientemente de las señales visuales que un ciclista ofrezca a los vehículos circundantes, lo mejor que puede hacer para protegerse es circular a la defensiva y no dar nunca por sentado que un coche sabe dónde está. La luz de seguridad para bicicletas es solo una herramienta más (aunque podría decirse que efectista) que permite a los ciclistas animar a los vehículos a mantener una distancia de seguridad y compartir la carretera.
¿Qué es un carril bici láser?
Los carriles bici láser han ganado popularidad en los últimos años como solución para mejorar la seguridad de los ciclistas en la carretera. Sin embargo, aunque en teoría puedan parecer una buena idea, esta tecnología presenta varios inconvenientes graves que hay que tener en cuenta.
Falta de aceptación universal: Uno de los principales problemas de los carriles bici láser es que no son universalmente aceptados como una solución segura y eficaz para los ciclistas. Esto se debe a que sólo proporcionan una ilusión de seguridad, en lugar de una protección física real para el ciclista. Además, muchos conductores no están familiarizados con el concepto de carril bici láser y pueden no tomárselo en serio, poniendo en peligro a los ciclistas.
Poca visibilidad con mal tiempo: Otro inconveniente de los carriles bici láser es su escasa visibilidad en condiciones meteorológicas adversas, como lluvia o nieve. Esto los convierte en una opción menos fiable para los ciclistas, que pueden seguir corriendo el riesgo de sufrir accidentes aunque utilicen estos carriles.
Falta de protección física: Los carriles bici láser no ofrecen protección física a los ciclistas, que es un factor clave para evitar daños personales en caso de accidente. A diferencia de los carriles bici tradicionales, que están separados físicamente de la calzada y proporcionan una barrera entre ciclistas y conductores, los carriles bici láser no ofrecen esa protección.
Instalación incómoda: La instalación de carriles bici láser también puede ser un engorro y puede resultar difícil de implantar en zonas urbanas donde el espacio es limitado. Esto significa que no siempre son una solución práctica para mejorar la seguridad de los ciclistas en todos los entornos. Asimismo, los carriles bici láser personales que se instalan en bicicletas individuales pueden ser poco fiables y requerir una recalibración frecuente.
Datos interesantes sobre los primeros carriles bici láser
- El primer carril bici láser, formado por dos filas de láseres verdes proyectados sobre el suelo, se instaló en los Países Bajos en 2012 para aumentar la visibilidad de los ciclistas.
- Este carril de 2 metros de ancho se extiende hasta 50 metros y es visible hasta 50 metros de distancia, garantizando que los ciclistas sean vistos fácilmente por los automovilistas en cualquier condición meteorológica.
- El carril bici láser funciona con energía solar y puede durar hasta 10 horas con una sola carga, lo que lo convierte en una solución ecológica para la seguridad de los ciclistas.
- Instalado en más de 50 ciudades de todo el mundo, se calcula que el carril bici láser reduce el número de accidentes relacionados con bicicletas en un 40% y ahorra hasta un millón de euros al año en costes relacionados con accidentes.
- Se calcula que el carril bici láser también reducirá hasta en un 20% el número de víctimas mortales relacionadas con las bicicletas, lo que lo convierte en una solución prometedora para mejorar la seguridad de los ciclistas en la carretera.
- Los peatones también pueden beneficiarse de una mayor visibilidad en los cruces y pasos de peatones, haciendo que las calles sean más seguras para todos los usuarios.
- El carril bici láser es sólo un ejemplo del uso de la tecnología para mejorar la seguridad de ciclistas y peatones en aceras y calles.