Tras el error en su respuesta inicial a la masiva explosión de la tubería de San Bruno el pasado septiembre, la empresa de servicios públicos Pacific Gas & Electric pareció asumir la responsabilidad del accidente, e incluso compró anuncios a toda página en los periódicos de la zona proclamando "Pedimos disculpas". Pero esta semana, PG&E ha dado marcha atrás en sus declaraciones ante los tribunales, negando toda culpa en la mortal explosión de la tubería y sugiriendo que otras partes fueron responsables, al menos en parte, con el fin de eludir millones de dólares en daños y perjuicios de más de 100 demandas.
PG&E culpó a terceros e incluso a las propias víctimas de la explosión de contribuir a la explosión de la tubería del pasado septiembre, que destruyó 38 viviendas, mató a 8 personas e hirió a muchas más. La compañía de gas y electricidad escribió en los archivos judiciales que estas víctimas "pueden haber sido legalmente responsables en virtud de una doctrina de negligencia comparativa (o) negligencia contribuyente", pero no indicó las formas específicas en que pueden haber sido negligentes. San Bruno City Manager Connie Jackson llamó a sus afirmaciones "completamente sorprendente ... Es lamentable que han tirado todo más el fregadero de la cocina en esto, para cubrir su estrategia legal."
Dejando a un lado las afirmaciones de PG&E, veamos las pruebas que han salido a la luz en los últimos 9 meses gracias al trabajo de los periodistas y defensores de la seguridad de la zona de la bahía.
- En 2004, la agencia nacional que regula los gasoductos informó de que la degradación de las tuberías puede producirse sin apenas daños evidentes y exigió a las principales empresas gasistas que realizaran "evaluaciones basadas en el riesgo." Tras el accidente, el Wall Street Journal informó de que "no se tomó ninguna de las medidas especiales en el caso del gasoducto de San Bruno que explotó."
- Entre 2003 y 2010, PG&E aumentó la presión de las tuberías de gas en San Bruno hasta niveles peligrosos en más de una docena de ocasiones, según el San Francisco Chronicle. En diciembre de 2003 y de nuevo en 2008, la tubería alcanzó el límite federal de 400 libras por pulgada cuadrada. Los defensores de la seguridad afirman que las otras 10 tuberías sometidas a pruebas similares podrían ser vulnerables a futuras explosiones.
- La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte ha criticado repetidamente a PG&E por graves "problemas de mantenimiento de registros" que, según ellos, podrían dar lugar a ajustes de presión "potencialmente inseguros" e incluso a futuras explosiones de tuberías. En un ejemplo, PG&E afirmó inicialmente que la tubería de San Bruno en cuestión no tenía costuras rotas, lo que posteriormente se demostró falso.
Es difícil saber si PG&E mantendrá esta obstinación a lo largo del proceso legal. Por ahora, la portavoz de PG&E, Brittany Chord, ha calificado la presentación como "una parte normal del proceso legal" y ha dicho que PG&E "seguirá avanzando y trabajando para resolver las reclamaciones de todas las partes lo antes posible."
ACTUALIZACIÓN: PG&E afirma ahora que no culpó a las víctimas de la explosión de la tubería del pasado septiembre. "Queremos que quede muy claro que nadie en PG&E sugeriría que los demandantes o los residentes de San Bruno afectados por este accidente son de alguna manera culpables", dijo la compañía en un comunicado.
Crédito de la foto: smi23le