Conducción distraída no es sólo peligroso e irreflexivo. También es un delito mayor cuando se asocia a las circunstancias más aterradoras. El 15 de septiembre, Ani Voskanian, de 20 años, provocó un accidente por conducción distraída en el que murió Misak Ranjbar, de 80 años. Esta semana, Voskanian fue acusada de homicidio involuntario con vehículo en el condado de Los Ángeles e ingresó en prisión. Su fianza se fijó en 50.000 dólares.
Accidentes como éste respaldan la necesidad de leyes más estrictas contra la conducción distraída. El Secretario de Transporte , Ray LaHood, ha insistido en la necesidad de tales leyes. El año pasado, la conducción distraída causó 5.500 muertos y casi 500.000 heridos. Además, enviar mensajes de texto o teclear al volante multiplica por cuatro las probabilidades de accidente. En abril, el Departamento de Transporte puso en marcha programas piloto de aplicación reforzada en Hartfort (CT) y Syracuse (NY). LaHood informa con orgullo de que, en sólo seis meses, "el uso del teléfono móvil en la mano ha descendido un 56% en Hartford y un 38% en Siracusa; y el envío de mensajes de texto mientras se conduce ha disminuido un 68% en Hartford y un 42% en Siracusa".
Lamentablemente, en la actualidad estas leyes no se aplican tan adecuadamente como deberían. Aunque California prohíbe el envío de mensajes de texto y el uso de dispositivos portátiles al volante, los conductores siguen pensando que no se convertirán en una de las horribles estadísticas citadas por los detractores de la conducción distraída.
En respuesta al reciente repunte de conductores distraídos, el columnista del Contra Costa Times Tom Barnidge escribió esta semana una amplia denuncia sobre quienes él llama "idiotas". He aquí un extracto:
Hace tres semanas, el Automobile Club of Southern California informó de que el número de personas que envían mensajes de texto mientras conducen en California se ha duplicado desde que el estado prohibió esta práctica en enero de 2009.
Ese estudio observó el tráfico de cercanías en el condado de Orange, pero se descubrieron resultados similares más cerca de casa. Cuando las autoridades de East Bay llevaron a cabo una campaña de dos días de duración en agosto, expidieron más de 400 multas a conductores del condado de Contra Costa por infringir la ley de manos libres, es decir, una infracción cada siete minutos, sin contar a los que eludieron la detección.
Al igual que algunas personas siempre se negarán a llevar puesto el cinturón de seguridad y otras seguirán conduciendo ebrias, es poco probable que los gobiernos estatales puedan erradicar por completo la epidemia de la conducción distraída. Pero sé inteligente y recuerda conducir sin enviar mensajes de texto, teclear o hablar por teléfono. Y echa un vistazo a nuestra lista de dispositivos tecnológicos que pueden ayudar a los conductores a controlar estas distracciones.
Crédito de la foto: elevatorlady