La ciudad de Oakland ha publicado un informe sobre la marcha del proyecto de calles completas de la avenida Telegraph para evaluar sus resultados en los seis primeros meses. El proyecto ha sido alabado por su audaz enfoque y ridiculizado por su torpe puesta en marcha, mientras que un grupo de residentes locales ha estado presionando para que se revierta. El informe de situación se basa en datos para reflexionar sobre lo que ha funcionado, lo que no y cómo puede mejorarse el diseño.
Desde la implantación del nuevo diseño la primavera pasada, el corredor ha experimentado resultados muy alentadores. A pesar de un diseño poco convencional y de una curva de aprendizaje para los usuarios, Telegraph ha experimentado una enorme mejora en varios parámetros de seguridad:
- Ninguna colisión con peatones (por primera vez en cinco años)
- Disminución del 40% del total de colisiones
- El 79% de los ciclistas y el 63% de los peatones afirman sentirse más seguros.
- Disminución del 27-45% del exceso de velocidad
A pesar de estas ventajas, el proyecto dista mucho de ser un éxito rotundo. El diseño provisional de Telegraph incluye sólo delineadores pintados, que han demostrado ser ineficaces para influir en el comportamiento de los conductores. En consecuencia, los carriles bici protegidos por aparcamientos han carecido de protección y han sido víctimas de los mismos bloqueos de carriles bici que otros corredores de la ciudad. Además de aparcar en los carriles bici, las ambiguas zonas pintadas de beige han sido otro de los lugares favoritos para aparcar suciamente. Las infracciones de aparcamiento se cuadruplicaron en los dos primeros meses del nuevo diseño y siguen siendo el doble de la media anterior; los observadores casuales notarán que el Ayuntamiento podría multar muchas más infracciones si quisiera.
El informe de situación identifica tres mejoras en el corredor. A corto plazo, el Ayuntamiento añadirá los tan necesarios postes blandos y mejorará la señalización para delimitar las zonas de aparcamiento de los carriles bici. El Ayuntamiento también pintará de otro color las ambiguas zonas beige para disuadir de las infracciones de estacionamiento, aunque también se necesitan delimitadores verticales para estas zonas. Con el tiempo, la ciudad añadirá bordillos permanentes e islas de embarque de autobuses como resultado de una subvención para mejorarlos. Las obras de estas mejoras permanentes comenzarán dentro de unos dos años, cuando se disponga de los fondos necesarios. Aunque la solución permanente no puede llegar pronto, estas mejoras temporales deberían ayudar a reducir la confusión.
El Proyecto de Calles Completas del Telégrafo ha sido una experiencia de aprendizaje para todas las partes implicadas. Desde el punto de vista de los peatones y de la pacificación del tráfico, constituye un ejemplo más de las ventajas de las reducciones de calzada para mejorar la seguridad y la transitabilidad. Sin embargo, también ha puesto de manifiesto los límites de los enfoques provisionales frente a diseños de calles más innovadores. Aunque los carriles bici protegidos representan el estándar de oro del diseño de carriles bici, su eficacia se diluye sustancialmente sin protección física mediante bordillos, paradas de aparcamiento o jardineras. Una solución barata a base de pintura puede a veces hacer más mal que bien. La ciudad merece un gran reconocimiento por perseverar a pesar de las reacciones negativas provocadas por una implantación accidentada, pero no puede permitirse cometer un error similar en corredores más controvertidos como Park, Grand, Broadway o San Pablo.