La próxima vez que salgas a dar una vuelta y te encuentres con un semáforo en rojo, presta atención a dónde paras el coche. Si te encuentras parado detrás de otro coche, fíjate a qué distancia te detienes. ¿Puedes ver la matrícula trasera del coche que tienes delante?
En la autoescuela me enseñaron a parar siempre con suficiente espacio entre el coche que te precede y tú. De ese modo, si el coche de detrás te embiste por detrás, es menos probable que te empuje contra el de delante. Pero hay otra buena razón para dejar espacio entre tú y el coche que te precede: el peligro de que ese coche te embista por detrás.
Puede que pienses que nunca ocurre. ¿Quién pone la marcha atrás en carretera? ¿No está esa marcha reservada para salir marcha atrás de las plazas de aparcamiento o para hacer giros de tres puntos en situaciones en las que la carretera es demasiado estrecha para dar la vuelta en U? Pero resulta que es tan necesario proteger la parte delantera de tu coche en los semáforos en rojo como la trasera.
De hecho, parece que este extraño comportamiento de marcha atrás es tan común que Roadshow, una columna habitual del Mercury News, hizo una columna sobre ello. Y aquí en GJEL, vemos nuestra parte justa de accidentes de coche interesantes. De hecho, parece que el hecho de que un coche se te eche encima no sólo ocurre en los semáforos en rojo.
Otro consejo de educación vial: ¡mantén una distancia de seguridad con los coches que circulan delante de ti! Eso significa que por cada 16 km/h que recorras, debes dejar un segundo de espacio. ¿Te has confundido? Aquí tienes un ejemplo: Si vas a cuarenta kilómetros por hora, deberías tardar cuatro segundos en adelantar lo que haya adelantado el coche que te precede. Puedes comprobarlo fácilmente. Fíjate en el momento en que el coche que te precede pasa por delante de algo -un árbol, un poste de la luz, una entrada- y cuenta los segundos que transcurren hasta que lo pasas tú. Esto debería darte tiempo suficiente para reaccionar ante cualquier comportamiento extraño por parte del coche que te precede.
La lección es mantener siempre una distancia de seguridad con los coches que te rodean. Si lo haces, tendrás tiempo de reacción suficiente para evitar un accidente grave e incluso podrías salvar la vida.