Para un Estado empantanado por un déficit presupuestario de 19.000 millones de dólares, cualquier idea para recaudar dinero sin aumentar los impuestos resulta atractiva. Por eso, un puñado de legisladores californianos se han alineado para apoyar un plan futurista de matrículas electrónicas que parpadean con información publicitaria cuando el vehículo se detiene durante más de cuatro segundos, un plan que, según los críticos, podría inducir un aumento de los impuestos. distracciones peligrosas al volante.
El autor del proyecto de ley, el senador Curran Price, de Los Ángeles, dijo que espera que el Departamento de Vehículos de Motor del estado sea el primero del país en prestar su apoyo a este innovador cambio en la interacción vial. "Estamos tratando de encontrar formas creativas de generar ingresos adicionales", dijo Price. "Es una emocionante unión de la tecnología con la necesidad, y una oportunidad para mantener a California en la vanguardia".
Dicho esto, es difícil saber hasta dónde llegará el chuleo de las matrículas, y si podría acabar causando una distracción más a los conductores, ya de por sí sobrecargados de teléfonos móviles y otros aparatos portátiles. La empresa de San Francisco que diseña las matrículas -Smart Plate- ha dicho que los conductores podrían llegar a profesar lealtad a una universidad o equipo deportivo en lugar de información publicitaria. "La idea no es convertir el vehículo de un automovilista en una valla publicitaria móvil", ha dicho el presidente de Smart Plate, M. Conrad Jordan, sino "crear una plataforma para que los automovilistas muestren su apoyo a organizaciones que funcionan bien".
De momento, la Patrulla de Carreteras de California no se ha pronunciado sobre las controvertidas matrículas. Pero en una época en la que la tecnología parece imparable (y en el estado más tecnológico del país), la aprobación de las matrículas electrónicas parece inevitable. Sólo podemos esperar que estén diseñadas de forma eficaz para evitar que se produzcan más accidentes de tráfico relacionados con la conducción distraída.
Crédito de la foto: rick